4. Series de Familia que te hacen apreciar la tuya
Las series de familia son uno de esos géneros que enganchan fácilmente por la trama pero que, muchas veces,por su falta de acción o repetitividad, cansan enseguida. En este género englobo a aquellas series cuyo eje principal es la familia y todos los miembros tienen un papel importante (no necesariamente la serie habla solo de ellos como familia, a veces hay elementos exteriores que guían la acción) Personalmente me he empezado varias series de este tipo porque se ven rápido y no te requieren pensar mucho, algo que a veces se agradece, pero he acabado abandonando la mayoría.
Dicho esto, en esta entrada os hablaré de dos series de las que no me cansé☺.
SHAMELESS:
Ya por la novena temporada, está serie mantiene su originalidad y calidad de siempre. Esta joya que os presento narra la vida de la peculiar y disfuncional familia Gallagher. Veo oportuno dejaros aquí el enlace al trailer de la primera temporada porque en él se presentan a los miembros de esta alocada familia desde el punto de vista de el padre, un alcohólico despreocupado. No tiene desprecio.
En esta serie, su creador, Paul Abbott, nos sitúa en un barrio pobre de la ciudad de Chicago, en una familia de clase obrera que parece condenada al fracaso debido a la inmadurez de sus progenitores.
La familia consta de seis hijos y el "padre", pongo padre entre comillas porque este personaje, Frank, es de todo menos eso. Adicto al alcohol y a las drogas nunca cuida a sus hijos y solo se aprovecha de su caridad y, en el caso de los pequeños, de su inocencia para conseguir sus objetivos. Aunque se nos presente como una persona horrible y su atrevimiento e insolencia te harán odiarlo, también hay que decir que sus peripecias te sacarán una sonrisa en más de una ocasión.
Cumpliendo el papel de madre (y padre) tenemos a Fiona (la hija mayor) que debido a la falta de sensatez de su padre se ve obligada a cuidar de sus cinco hermanos pequeños: Lip, un genio matemático apasionado por la chicas y también entregado al cuidado de sus hermanos; Ian, un adolescente tranquilo cuya sexualidad le traerá algún que otro conflicto; Debbie, una dulce niña de 10 años obediente y cariñosa (probablemente la única que quiere a su padre); Carl, típico niño travieso y alocado que no quiere estudiar; y Liam, un bebe que apenás habla.
Creo que lo más bonito de esta serie es que debido a su extensión (ya 9 temporadas), uno acaba conociendo a los personajes muy a fondo y ver su evolución real como personas. Todos los personajes tienen un importante trasfondo psicológico y con algunos básicamente creces con ellos, ya que les ves pasar de la infancia a las adolescencia. Creo que es una serie muy realista en el sentido de que no se andan con tapujos a la hora de hablar de temas como la salud mental, las relaciones amorosas o las adicciones; por otro lado, son sus escenas surrealistas las que te enganchan y te hacen reír. Sin duda, esta es una de mis series favoritas, pero aviso:es mejor verla con calma ya que ahora mismo cuenta con 99 episodios de 40 minutos y verla de golpe podría saturar demasiado.
BIG LITTLE LIES:
Aquí os presento una serie bastante nueva (de 2017), cuya historia, aparentemente simple, me impactó muchísimo y me obligó a acabármela en apenas 3 días. Solo consta de 7 episodios de aproximadamente una hora de duración. No puedo profundizar mucho debido a que es corta y no quiero hacer spoilers, perolos testigos os intentaré explicar porque creo que debéis darla una oportunidad.
Esta historia comienza con un asesinato. Esto lo sabemos porque vemos a la policía y además aparecen pequeños trozos de entrevistas a testigos, pero nunca se nos dice quién a sido el asesinado. Una vez que se nos da esta pieza de información, la historia vuelve al pasado y comienza a narrar la vida de las familias de Monterrey(un pueblo situado al norte de California). En concreto la narrativa se centra en tres familias cuyo elemento común son sus hijos de diez años que asisten a la misma escuela. El hecho de que sepamos que va a haber un asesinato, pero que no se nos diga quién es el muerto, nos mantiene en una constante tensión durante toda la serie y hace que a medida que transcurre esta nos vayamos haciendo inevitablemente teorías e hipótesis en nuestra cabeza sobre el asesinato. Ya solo por este elemento creo que merece la pena verla, pero es que además, las actuaciones son sinceramente impecables y los temas que rodean a la trama hacen reflexionar mucho sobre como tratamos a nuestros hijos y sobre el papel de los padres. Aviso, que en la serie se tocan temas muy delicados como la violencia de género y las violaciones y hay algunas escenas un tanto angustiosas no aptas para gente sensible. Dicho esto, recomiendo firmemente que le deis una oportunidad al primer capítulo, aunque hacedlo en un momento que tengáis un poco de tiempo libre porque inevitablemente os encontraréis en la necesidad de ver le segundo y el tercero como mínimo.
Dicho esto, en esta entrada os hablaré de dos series de las que no me cansé☺.
SHAMELESS:
Ya por la novena temporada, está serie mantiene su originalidad y calidad de siempre. Esta joya que os presento narra la vida de la peculiar y disfuncional familia Gallagher. Veo oportuno dejaros aquí el enlace al trailer de la primera temporada porque en él se presentan a los miembros de esta alocada familia desde el punto de vista de el padre, un alcohólico despreocupado. No tiene desprecio.En esta serie, su creador, Paul Abbott, nos sitúa en un barrio pobre de la ciudad de Chicago, en una familia de clase obrera que parece condenada al fracaso debido a la inmadurez de sus progenitores.
La familia consta de seis hijos y el "padre", pongo padre entre comillas porque este personaje, Frank, es de todo menos eso. Adicto al alcohol y a las drogas nunca cuida a sus hijos y solo se aprovecha de su caridad y, en el caso de los pequeños, de su inocencia para conseguir sus objetivos. Aunque se nos presente como una persona horrible y su atrevimiento e insolencia te harán odiarlo, también hay que decir que sus peripecias te sacarán una sonrisa en más de una ocasión.
Cumpliendo el papel de madre (y padre) tenemos a Fiona (la hija mayor) que debido a la falta de sensatez de su padre se ve obligada a cuidar de sus cinco hermanos pequeños: Lip, un genio matemático apasionado por la chicas y también entregado al cuidado de sus hermanos; Ian, un adolescente tranquilo cuya sexualidad le traerá algún que otro conflicto; Debbie, una dulce niña de 10 años obediente y cariñosa (probablemente la única que quiere a su padre); Carl, típico niño travieso y alocado que no quiere estudiar; y Liam, un bebe que apenás habla.
Creo que lo más bonito de esta serie es que debido a su extensión (ya 9 temporadas), uno acaba conociendo a los personajes muy a fondo y ver su evolución real como personas. Todos los personajes tienen un importante trasfondo psicológico y con algunos básicamente creces con ellos, ya que les ves pasar de la infancia a las adolescencia. Creo que es una serie muy realista en el sentido de que no se andan con tapujos a la hora de hablar de temas como la salud mental, las relaciones amorosas o las adicciones; por otro lado, son sus escenas surrealistas las que te enganchan y te hacen reír. Sin duda, esta es una de mis series favoritas, pero aviso:es mejor verla con calma ya que ahora mismo cuenta con 99 episodios de 40 minutos y verla de golpe podría saturar demasiado.
BIG LITTLE LIES:
Esta historia comienza con un asesinato. Esto lo sabemos porque vemos a la policía y además aparecen pequeños trozos de entrevistas a testigos, pero nunca se nos dice quién a sido el asesinado. Una vez que se nos da esta pieza de información, la historia vuelve al pasado y comienza a narrar la vida de las familias de Monterrey(un pueblo situado al norte de California). En concreto la narrativa se centra en tres familias cuyo elemento común son sus hijos de diez años que asisten a la misma escuela. El hecho de que sepamos que va a haber un asesinato, pero que no se nos diga quién es el muerto, nos mantiene en una constante tensión durante toda la serie y hace que a medida que transcurre esta nos vayamos haciendo inevitablemente teorías e hipótesis en nuestra cabeza sobre el asesinato. Ya solo por este elemento creo que merece la pena verla, pero es que además, las actuaciones son sinceramente impecables y los temas que rodean a la trama hacen reflexionar mucho sobre como tratamos a nuestros hijos y sobre el papel de los padres. Aviso, que en la serie se tocan temas muy delicados como la violencia de género y las violaciones y hay algunas escenas un tanto angustiosas no aptas para gente sensible. Dicho esto, recomiendo firmemente que le deis una oportunidad al primer capítulo, aunque hacedlo en un momento que tengáis un poco de tiempo libre porque inevitablemente os encontraréis en la necesidad de ver le segundo y el tercero como mínimo.
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